Thursday, September 09, 2010

El lamentable error de Stephen Hawking

Opinión
Oswaldo Pulgar Pérez
El Universal - Venezuela



Stephen Hawking, notable físico británico declaró en estos días: "Dios no creó el universo. Las teorías científicas convierten en superflua su intervención".

Confunde que esto venga de un científico honrado. "Dado que existe una ley como la de la gravedad, el universo pudo crearse a sí mismo -y de hecho lo hizo- de la nada. La creación espontánea es la razón de que exista algo, de que exista el universo, de que existamos nosotros".

Si nos encontramos un bolígrafo por la calle, eso quiere decir que alguien lo puso allí, o se le cayó. Nadie piensa que se puso a sí mismo, después de un complicado proceso autocreativo.

No se entiende cómo de la existencia de la gravedad se puede deducir que el mundo se hizo a sí mismo. Eso es tan ilógico como decir que como existen leyes de tránsito, ellas se han confeccionado a sí mismas y además originan -sin intervención de nadie- nuevas leyes.

"Esto ocurre -dice Potter- porque los científicos se encierran cada vez más en sus especializaciones. Uno sabe mucho de las células de la mano, otro sabe casi todo de las escamas del cocodrilo, otro se dedica producir un arroz supernutritivo.

Sin embargo, -continúa Potter-, es urgente que alguien ayude a los científicos a ver el conjunto (y no extrapolar). Para evitarlo están las ciencias humanísticas". El especialista sabe mucho de poco y eso no es peyorativo. La filosofía le sirve a las ciencias como estuche. Así lo conocido por la ciencia es integrado en un conocimiento superior.

Dice Maxwell: "Una de las pruebas más difíciles para una mente científica es conocer los límites de su propio método". Por Ej. El método de la física trata de los aspectos cuantitativos de los cuerpos en movimiento. Consideremos el asesinato. La acción -coger un cuchillo y clavárselo a otro- puede ser descrita en términos cuantitativos: el tamaño del cuchillo, la profundidad de la herida, y el momento exacto en que expiró la víctima.

Sin embargo, estos datos no nos permiten saber si la persona muerta era inocente, si la acción fue moralmente lícita o ilícita o si el asesino sintió remordimiento.

La ciencia no puede explicar los aspectos cualitativos: ¿Qué es esto? ¿Por qué existe? ¿Quién lo hizo? ¿Para qué sirve? Eso le corresponde a otra ciencia: la filosofía, porque ese es su objetivo específico.

Todo conocimiento científico es verdadero pues no se puede hacer ciencia de lo falso. Pero eso no quiere decir que todo conocimiento verdadero haya de ser científico. Una cultura positivista como la nuestra, construida sobre bases científicas, tiene a creer que lo que no se puede demostrar con la ciencia, no existe.

La prudencia y la humildad son virtudes necesarias para un científico. Razón tiene Paúl Johnson cuando dice que los hombres somos muy soberbios. "Si un Premio Nobel de Física dice algo, incluso si no está relacionado con su campo específico de estudio, enseguida sale en la prensa.

Puede hablar de cuanto existe bajo el cielo, puede incluso decir tonterías, pero diga lo que diga, uno tiende a dudar de sí mismo antes que de las declaraciones de un Nobel". (Jaki).

Señor Hawking: usted no puede mezclar ciencia y religión porque son conocimientos distintos. Con sus ecuaciones no puede afirmar ni negar la intervención de Dios. Se le escapa como un jabón mojado de las manos. Hable de lo que usted sabe, que no es poco y absténgase de confundir a quienes no han tenido -como usted- la oportunidad de estudiar.
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Wednesday, September 08, 2010

El golpe de mercado explicado a un extraterrestre

Si llegáramos de otro planeta y alguien nos contara lo que está sucediendo en la Tierra, no daríamos crédito:

* Un grupo de bancos y empresas financieras fabricantes de aire, se meten en negocios sucios y quiebran.
* Los Estados se apresuran a entregarles cantidades obscenas del dinero de los ciudadanos para que se mantengan, para que siga funcionando “el sistema”.
* Los gobernantes se ponen muy serios y acuerdan establecer controles a la especulación y acabar con los paraísos fiscales de los beneficios sin impuestos. Transcurrido más de un año, esas medidas no se producen.
* Los Estados se endeudan por el desembolso que les ha supuesto salvar “el sistema”, a base de regalar millones a los poderosos. Los bancos se lo exigen agriamente y con intereses. Las agencias de calificación –sufragadas por el “mercado”- dan nota a los Estados en un nuevo juego especulativo. Señalan las dianas a abatir.
* El “mercado” se “intranquiliza” y sume a la bolsa en una montaña rusa (la “bolsa” sirve para que unos cuantos inversores privados se enriquezcan).
* Los portavoces del “mercado” –FMI, Bruselas y otros organismos internacionales- toman oficialmente las riendas y ordenan a los Gobiernos las medidas a tomar para que sus clientes continúen lucrándose. Nosotros, no ellos, hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. Antes de su voracidad extrema, no teníamos ese problema.
* Los Gobiernos se apresuran a cumplir los mandatos recibidos: Mermar el estado del bienestar, exprimir y empobrecer a los ciudadanos, para obtener dinero con el que saciar a sus amos. Han de mantener “el sistema” –ese ente tan perfecto que tiene sumido en la pobreza absoluta a dos tercios de la Humanidad por ejemplo-.
* Los ciudadanos se callan. Tragan. Todo lo que se les eche. En Grecia –con los “ajustes” más draconianos- las huelgas, con sus muertos y todo, no sirven para nada. En Islandia –país que fue el primero en caer convirtiendo TODOS los ahorros de los ciudadanos en papel mojado y que ya protestó lo suyo sin éxito-, acaban de elegir a un humorista como alcalde de la capital, Reykjavik. Su formación se declara abiertamente corrupta y asegura que no cumplirá sus promesas. Las organizaciones sociales no encuentran momento de actuar conjuntamente para dar una respuesta. Pasivas como el resto de la ciudadanía.

Quizás, podía haberle resumido la historia al extraterrestre diciendo:

* Un reducido número de indeseables trampean y estafan con ánimo de lucro desmedido, y, tras someter a los gobiernos representantes de la soberanía popular, hacen pagar la cuenta a los ciudadanos. Éstos, endeudados hasta las pestañas por la estrategia del “mercado/sistema”, abducidos por la propaganda, se someten a cuantas perrerías les hagan.

Continúa siendo muy largo. A ver así:

* Se acabó la democracia en el planeta tierra, el “mercado” ha dado un golpe de Estado.

(Extracto del blog "Periscopio" de Rosa Maria Artal)

El próximo mes me nivelo (Julio Ramón Ribeyro, 1969)

El próximo mes me nivelo El próximo mes me nivelo (no se publicó como un libro individual,  fue publicado en 1972  como parte del  segundo t...